viernes, 16 de marzo de 2012

LAS INTERMITENCIAS DE LA REALIDAD (2ª parte)


Sorprendentemente no se desató la alarma social, aunque sí se produjeron algunos enfrentamientos entre determinados sectores de la población. Era frecuente ver como agrupaciones de poetas dadaístas, pintores surrealistas o incluso ávidos lectores del realismo mágico, iban a las puertas de los ateneos de filósofos neokantianos para jactarse ante ellos de todo lo que estaba ocurriendo. Del mismo modo, anarquistas, libertarios y demás utópicos creían ver en esa zozobra de la realidad la consecución de sus históricas reivindicaciones políticas. Aunque unos y otros, reconocieron pronto que quizás este viraje superaba con creces sus expectativas, estando ellos también atrapados en esta vorágine. Del otro lado, religiosos, políticos conservadores,  teóricos del positivismo o ingenieros, no se sentían tan a gusto al ser derrotados constantemente por el libre albedrío, pero tuvieron que reconocer en masa que ni sabían el porqué de este giro de la realidad, ni, lo que era más grave, sabían cómo solucionarlo.

¿Qué hacer entonces? La única opción era pues dejarse llevar por la nueva situación, con la esperanza de que los cambios que en ellos fueran ejercidos, tuvieran al menos un carácter positivo. No había nada que hacer, incapaz nadie de emprender un estudio científico serio, constante y ordenado. Los últimos adalides del orden y de la lógica se limitaron a realizar experimentos, comprometiéndose en miles de situaciones, alterando constantemente parámetros y variables, para comprobar siempre que, efectivamente, nada seguía ya un orden racional.

¿Cuánto duró este caos? Tampoco se podía saber a ciencia cierta, estando también alteradas las leyes temporales. Habría que recurrir para saberlo, a las mediciones que se hicieron desde los países limítrofes. Aunque los científicos y demás estudiosos de dichos países fronterizos, tampoco se pusieron de acuerdo, ya que los datos con los que trabajaban eran bastante dispares. Se habla de semanas, meses e incluso años. Eso nunca se sabrá. Lo cierto es que el orden llegó del mismo modo en que había vuelto. Un buen día, los trenes del país empezaron a retrasarse en sus salidas y destinos de un modo que entraba dentro de lo razonable. Ese mismo día, miles de suicidas se precipitaron velozmente contra el asfalto de la calle. Y lo que resultó aún más esclarecedor, el vigente campeón de liga, compuesto por una docena de chiquillos de trece años, recibió una incontestable paliza de 36 a 0. Todo volvió así a la normalidad.

Los surrealistas despertaron del sueño y los científicos respiraron aliviados. Y empezaron inmediatamente, sin sufrir ya ningún tipo de contratiempo, a desarrollar sesudos estudios para encontrar los motivos y las consecuencias de tamaño desvarío nacional. Pero pasados los meses, no se halló una solución clara, ninguna respuesta concluyente. Se limitaron a limpiar de las calles la sangre de los suicidas y la nación entera cayó en un estado cercano al de una monumental resaca, con una desazón similar a la de cualquier nochevieja o celebración patria. Eso sí, en todos y cada uno de los protagonistas de esta historia, quedó un regusto amargo, una ligera conciencia de que las situaciones vividas no fueron tan extrañas, y de que la realidad que ahora volvían a vivir no era tan razonable, no era tan lógica y no era tan previsible. Unos y otros, no encontraban ya tanta diferencia entre la locura y el entendimiento. 

FIN

3 comentarios:

Idril dijo...

Todos los días pasan cosas surrealistas, mira lo que hizo tu Athletic el otro día.. jejeje. Muy chulo el cuento, me alegro de que vuelvas a escribir cuentecillos. Un beso.

selvatica silvia dijo...

Muy chulo el cuento, me ha recordado una peli que adoro, "amanece que no es poco"...oye un descubrimiento este blog, me encanta. Un abrazo

Tresmasqueperros dijo...

Gracias selvática por los comentarios. Ey, tampoco está mal tu rinconcito literario, ya me di la primera vuelta pero no he podido dejar el primer comentario por problemas informáticos, jodios ordenadores...